07/03/2017

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Cualquiera que dé una vuelta por las calles de la ciudad estos días se da cuenta que medio Castelló está levantado. Sí, la cantidad de obras y actuaciones que se harán en 2017 es elevada. El trabajo en despachos de los últimos meses por fin ve la luz y sale a la calle. Un trabajo poco visible que involucra diferentes departamento del Ayuntamiento, donde los servicios técnicos y contratación suelen ser los principales actores.

El concepto obra ha adquirido connotaciones peyorativas en los últimos tiempos. A veces, se ha hecho un mal uso de ellas y por eso a menudo se olvidan las bondades que comportan. Es evidente que suponen una mejora de la vía pública, de la administración o del patrimonio cultural entre otros. Pero significan únicamente esto, provocan también un impulso económico a las empresas y provocan contrataciones, tan necesarias actualmente.

Con el superávit de 2015, se realizarán 20 proyectos con un precio de licitación de casi 9 millones de euros. La mayoría de estos proyectos ya están en marcha, como reasfaltado de 19 calles y mejoras de aceras y drenaje en alguno de ellos, un nuevo huerto urbano o la protección del patrimonio cultural con actuaciones al Planetario, el parque Ribalta, la Villa Romana de Vinamargo y Castell Vell. Otros de estos proyectos se ejecutarán en los próximo meses:mejoras en 5 escuelas, instalación de baños públicos en diferentes zonas de la ciudad o la remodelación integral del barrio de Maestría. Estos proyectos hacen patente la descentralización en las inversiones puesto que son actuaciones repartidas por toda la ciudad.

Y aunque se pueda pensar que con las actuaciones mencionadas ya hay bastante para este año, no es así. Para el 2017 hemos presupuestado un capítulo de inversiones de más de 10 millones de euros. Hay que añadir los proyectos valorados con más de millón y medio que la ciudadanía decidirá directamente con los Presupuestos Participativos, los casi 4 millones de euros que forman parte de la estrategia DUSI que ha conseguido fondos europeos como nunca antes y otras actuaciones como el Plan de Accesibilidad, mejoras en el cementerio, la 1a Travessera, el refugio de Tetuán o mejoras en el Pinar y en el Molí La Font, entre otros. Todas actuaciones previstas para este año, complementadas, además, con otras mediante los contratos de mantenimiento como actualmente se está trabajando en la limpieza del estanco del Parque Ribalta o el asfaltado de la avenida Casalduch.

Puede parecer una previsión demasiado ambiciosa y es cierto que este volumen de trabajo provoca problemas internos de funcionamiento, pero también es cierto que el trabajo y la dedicación del funcionariado hace posible que la ciudad esté cambiante. También somos conscientes que estas actuaciones provocan problemas para la ciudadanía en el momento de su ejecución, pero es un mal momentáneo. A algunos miembros de la oposición los molesta que Castelló esté levantado. Los molesta que hacemos cosas que mejoran la ciudad, aunque realmente no los molesta el que hagamos sinó que lo hacemos nosotros. Disculpan las molestias. Estamos mejorando Castelló.