16/10/2017

Artículo de opinión de Rafa Simó, portavoz socialista al Ayuntamiento de Castelló.

Si les soy sincero, hoy he estado tentado de contestar en las últimas declaraciones que la oposición populista ha hecho relativas a las inversiones al Grado, el proyecto participativo Grado Red Abierta y las subvenciones europeas. Pero después de meditarlo creo que no paga la pena entrar a desmontar más los argumentos postverídicos que suelen utilizar los miembros del primer partido imputado de la historia de la democracia española. Son expertos al mezclar temas para sacar provecho, un "totum revolutum" que hace más humo que luz y donde ellos, honestamente, son mejores que nosotros. Difama que algo queda.

Pienso que en la ciudad le ha ido bien el cambio de gobierno después de 24 años gobernada por el mismo partido. Y lo creo, entre otras cosas, porque ahora nos encontramos al PP pidiendo actuaciones que ellos prometían y que nosotros estamos haciendo. Además se intenta generar polémica de manera sistemática en dos temas en el que la diferencia entre realidad y postverdad popular resulta enorme: la transparencia y la religiosidad. Entiendo que la realidad es poliédrica y puede tener muchas caras pero cuando hay datos objetivos, caben pocos matices.

Se suele decir que generamos polémicas con la religión pero poco se dice que la ciudad ha sido premiada por la Fundación Pluralismo y Convivencia Ciudadana por las políticas de convivencia en la diversidad religiosa. Otra crítica habitual es la falta de transparencia del gobierno, pero no se dice que el ITA (ONG de transparencia internacional que evalúa Castelló desde 2010) ha puntuado en este gobierno con la máxima nota nunca obtenida. El trabajo de los compañeros López y Garcia no vende tanto como los titulares de la oposición.

Siempre se puede mejorar, ir a más. Siempre alguien podrá quedarse con la anécdota o con el error y no fijarse en el conjunto. Pero frente a argumentos subjetivos interesados, datos objetivos. Nosotros somos los primeros que queremos seguir avanzando, seguir mejorando.