04/04/2017

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Esta actividad favorece la autoestima de los discapacitados psíquicos y ayuda a mejorar su socialización.

Mejorar el estado de ánimo, potenciar la autoestima y fomentar las relaciones sociales son algunos de los numerosos beneficios de la terapia con perros, un tratamiento específico que continuarán disfrutando los alumnos del Castell Vell, centro escolar especializado en la atención a niños con dispacidad. La terapia está promovida por el AMPA del colegio y subvencionada por la concejalía de Educación, que la ha ampliado a todo el año. Comenzó en enero y se interrumpirá al acabar el curso en junio, pero después del verano seguirá funcionando de septiembre a diciembre. Se celebran un total de 40 horas distribuidas en dos días cada semana y todos los alumnos del centro, discapacitados físicos, psíquicos o sensoriales, se benefician de ella.

Los profesionales del centro promueven la interacción de los alumnos con los perros, que han sido especialmente adiestrados y son especialmente dóciles. Este tipo de actividad, que siempre se desarrolla con los mismos animales, "reporta numerosos beneficios a los chavales que participan, como han constatado numerosos estudios", señala el concejal Enric Porcar.

Los expertos en la educación de discapacitados psíquicos resaltan que los perros pueden ayudar a los niños a mejorar la comunicación y la expresión de sentimientos y emociones. "También tienen efectos positivos para la memoria y la orientación espacial, además de favorecer la relajación y las relaciones sociales mediante el trabajo en grupo", destaca la directora del centro, Ana Puig.